Si ya te cuidas, genial, si no te presentamos algunas novedades de cosmética masculina y algunos clásicos de siempre para llevar al límite de la perfección tu neceser. Por si eres de los que se está adentrando en el mundo de la belleza, poco a poco, vamos a empezar por el ABC de los productos. Vamos a dar por supuesto que ya usas loción para el afeitado, así que te recomendamos que empieces con hidratación, y busques fórmulas con texturas ligeras y refrescantes. Texturas como geles de fácil absorción y rápida aplicación, con las que notarás en seguida una piel hidratada. El paso dos para un principiante es el cambio de fórmula, una vez te hayas adaptado al gel pasa a una hidratante que contenga vitaminas y aminoácidos naturales que preparen la piel y suavizan. En muy poco tiempo notarás que tu piel no está tan seca y no se irrita tanto tras el afeitado. Correctores de ojos y sérum entrarían en un tercer nivel de perfección. Es un paso natural que va pidiendo la piel. ¿Y a quién no le gusta un gadget? Te proponemos algunos que además de limpiar tu fiel y cuidarla facilitarán tu afeitado. Para los que buscan un sobresaliente a nivel estético tenemos dos iniciativas básicas. La primera para esos pelos antiestéticos en zonas del cuerpo que lucirían mejor tras una depilación, que no son todas. Si lo que se busca es algo definitivo lo ideal es acudir a un centro especializado en depilación láser. Para los que se preocupan por el dolor hay que decir que actualmente (ya no es como hace años) se trata de equipos que eliminan el vello claro y el oscuro, sobre las pieles claras o bronceadas. Tienen una potencia relativamente baja; no emiten en picos, sino en onda continua por lo que no hay quemaduras ni apenas dolor. Además, funcionan por zonas, no pelo a pelo, por lo que podemos tratar grandes áreas. ¿Un ejemplo? El láser soprano. La segunda, no hay nada más sexy y elegante que unas manos bien cuidadas, y si descubres lo relajante que es que te hagan la manicura, seguro que lo metes en tu agenda como un imprescindible mensual. No imagines esmaltes en tu vida, en los centros dedicados a ello tan solo liman y cortan las uñas, eliminan las pielecitas, realizan una exfoliación y aplican una mascarilla para suavizar. Por último, con un pulidor dan brillo a las uñas. Calcula que le tendrás que dedicar entre 30 y 40 minutos.